miércoles, 10 de julio de 2013

Punto final a mi cuarta novela.

La idea se gestó hace ya casi año y medio, antes incluso de empezar Gespenst. Sin embargo, podría decirse que he escrito esta novela prácticamente en su totalidad en los últimos tres meses. Lo lógico, teniendo en cuenta que allá por octubre terminé una obra muy próxima en su filosofía al género de terror, era regresar a ese espacio en el que me solía sentir tan cómodo, el del thriller negro, y llevarlo a sus últimas consecuencias. Vamos, que he acabado escribiendo una novela policíaca, pero a mi manera, con más peso en el drama, en la tortura de personajes y en el misterio, que en la propia acción.

Es, a nivel objetivo, lo más largo, complejo y maduro que he escrito nunca. Una mezcla de novela negra con cucharadas mitológicas que hace especial hincapié en mi fascinación por lo femenino, por todo aquello que desaparece y por esa búsqueda eterna de un lugar en el mundo para nosotros.

El título (para mí, uno de sus mayores aciertos) no lo diré porque seguramente su destino más inmediato sean esos certámenes ingratos en los que siempre ganan los mismos, pero que al menos sirven para pensar que la novela se está moviendo, ventilando, cogiendo aire.

Es ya la sexta obra que culmino en menos de dos años y medio, la sexta con carácter de conjunto y vocación eminentemente profesional, sumando en total cuatro novelas, una novela corta y un libro de relatos (dejo fuera "Texturas del miedo", que en realidad fue una antología recopilatoria de lo mejor que había escrito entre los años 2004 y 2010). Es, por tanto, la confirmación de que trato de seguirle los pasos a mi creatividad, aunque eso no se vea reflejado en publicaciones. Pero ya sabéis, publicar hoy en día es eso que hacen unos cuantos faranduleros, aduladores y vendedores de libros: no conozco muchos escritores de verdad que publiquen. Aunque ese es otro tema mucho más rancio que no merece acaparar la alegría de este parto. Porque esta es una muesca más en este tronco que se dobla, el tatuaje a navaja de un amor efímero al que le queda poco tiempo más conmigo. Y hay que celebrarlo.

Quizás, algún día, la pueda compartir con todos vosotros.

12 comentarios :

  1. Felicidades leo!!! Como bien dices, lo importante realmente es haberlo conseguido ^_^. Xa-LFDM

    ResponderEliminar
  2. Respuestas
    1. XD Lo que tú quieras. Me da igual ganarte por 4-3 que por 5-3 :p

      Eliminar
    2. Mamón, ¿por qué esa diferenciación entre novelas y novela corta? Son novelas y punto, puta ardilla literaria. ¿Competimos ahora en publicaciones? XD

      Eliminar
    3. No la aparto por la extensión, sino porque la filosofía es completamente diferente. Mi novela corta está más cerca a Grotesque que a cualquiera de mis otras novelas, ¿o no?
      Y claro que no competimos, yo contigo no tengo rival :pp

      Eliminar
    4. Ah, que ahora se engloba como novela o relato según temática o filosofía de la obra. Si que eres complejo tú.

      Eliminar
    5. Mejor que contar palabras...

      Eliminar
  3. Enhorabuena compañero. A ver si uno de esos certámenes ingratos te da una sorpresa y averiguamos ese título. ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja, ja... Gracias, Pedro. Si no es con un certamen, espero que alguna editorial que merezca la pena apueste por ella. Un abrazo ;)

      Eliminar